Trastorno límite de la personalidad
Las personas que sufren un TLP presentan una hipersensibilidad al estrés y a todo lo que les rodea, produciéndoles una importante inestabilidad emocional.
Se experimenta un mal humor constante que se expresa con ira, rabia, violencia verbal o física que les resulta muy difícil de regular.
La impulsividad extrema hace que lleguen a ponerse en riesgo y entonces se dan situaciones cómo: relaciones sexuales promiscuas, descontrol de los hábitos alimentarios, adicciones, conducción temeraria, intentos de suicidio o bien comportamientos autolesivos.
Este trastorno de la personalidad a menudo se presenta acompañado de otros trastornos cómo: trastornos afectivos, de ansiedad, de abuso de sustancias o de la conducta alimentaria.